Según una encuesta1 realizada a directores de colegios privados de los segmentos A y B, el 74% de ellos ha priorizado la capacitación de sus docentes como parte de sus inversiones para este año, mientras mientras un 56% planea invertir en infraestructura, el 41% en renovación de equipos tecnológicos, el 38% en renovación de mobiliario y equipamiento, el 24% en áreas creativas y de deporte, y otro 24% en software y licencias.

En estos colegios la capacitación docente junto a la infraestructura y tecnología son consideradas una inversión que genera valor en el servicio educativo, maestros mejor capacitados y con recursos tecnológicos a su disposición podrán hacer efectivos mejores aprendizajes.

El reto que tienen los colegios de los segmentos C y D para seguir el paso a este modelo no radica en la dificultades económicas. En este segmento los colegios privados generan rentabilidad pero muchas veces carecen de norte pedagógico. También capacitan a sus maestros pero muchas veces siguiendo la moda del momento, la oferta de las universidades o el apoyo de las editoriales, que en ninguno de los casos puede responder directamente al proyecto educativo de su organización.

Un primer paso es poner los caballos delante del coche; primero el proyecto educativo de mediano y largo plazo y luego los insumos: capacitación, tecnología y acompañamiento. Esto que parece obvio lo podemos tener en mente pero no siempre lo aterrizamos en el plan operativo o el plan anual de trabajo; y cómo no lo aterrizamos al pasar las primeras semanas de marzo las capacitaciones quedan en el olvido, la tecnología sigue siendo la misma y el acompañamiento se reduce a monitorear las clases como siempre ha sido. Primera lección: alinear la capacitación con el proyecto educativo y darle formalidad a la intención, ponerlo en papel (o en la pantalla) para luego armonizarla con el acompañamiento pedagógico y los recursos tecnológicos.

Un segundo paso es enfocarnos mas en el resultado. La capacitación no es el fin sino el medio para la transformación. No capacitamos para que el docente sea mas erudito ni se desenvuelva mejor de manera individual. Capacitamos para que el proyecto educativo pueda hacerse realidad con el apoyo invaluable de cada docente como parte de una comunidad. Los resultados de la capacitación tienen que generar una transformación del servicio educativo. Si el colegio estaba enfocado en la transmisión de conocimientos, tras la capacitación y acompañamiento toda su pedagogía habrá girado hacia el desarrollo de competencias; si el colegio estaba alejado de la tecnología ahora habrá redefinido su modelo de aprendizaje gracias a la integración de la tecnología. Segunda lección: la inversión en capacitación debe generar resultados en la transformación del servicio educativo.

Un tercer paso es adoptar un modelo de transformación, la capacitación será solo una parte de la estrategia que aportará valor siempre que todo el colegio este enfocado en esta ruta. Para el caso de un colegio podemos destacar el Modelo de Trasformación LEAN con sus 5 dimensiones:

  • ¿Cuál es el propósito del cambio? ¿Qué problema estamos tratando de resolver? (Enfoque Situacional)
  • ¿Cómo estamos mejorando el trabajo verdadero? (Mejora de Procesos)
  • ¿Cómo estamos construyendo capacidades? (Desarrollo de Capacidades de las Personas)
  • ¿Qué comportamientos de liderazgo y sistemas de gestión se requieren para respaldar esta nueva forma de trabajar? (Liderazgo Responsable, Sistema de Gestión)
  • ¿Qué pensamiento básico, mentalidad o suposiciones comprenden la cultura existente e impulsan esta transformación?

Como podemos notar, la capacitación no es un complemento a los saberes que tiene un docente, ni es una simple actualización de conocimientos; la capacitación va más allá, es una dimensión clave en la transformación de los colegios. Tercera lección: Capacitamos a los profesores para transformar nuestro colegio.

Un cuarto paso es elegir el partner que ayudará a realizar todo el proceso de transformación. Conferencistas, expositores, talleristas hay muchos, y su impacto se va reduciendo conforme se apaga el eco de sus exposiciones. Es en ese escenario que se requiere de un socio a largo plazo. Un partner que no solo se enfoque en brindar horas de capacitación, o que solo ofrezca como mayor valor una acreditación sino que se comprometa junto al equipo directivo en llevar adelante esa transformación.

Junto a ese partner -antes de planificar la capacitación- pueden abordarse las 5 dimensiones del modelo LEAN vistas antes para establecer las acciones a seguir y de entre ellas organizar la secuencia formativa para dotar al personal docente de las capacidades y competencias que se requieren para el proyecto educativo que se ha definido. Cuarta lección: No estas solo, puedes apoyarte de un partner que colabore con la transformación de tu colegio.

Que estos 4 pasos sean una pequeña hoja de ruta que permita a mas colegios el dar el salto de la capacitación a la transformación.

  1. https://educacionalfuturo.com/articulos/situacion-de-colegios-privados-durante-el-2023-un-balance/ ↩︎
Categorías: Opinión

0 Comentarios

Deja una respuesta